Un grito ahogado intenta salir de ti. "Sálvame, por favor". Y cuando crees que nadie te oye, que nadie lo hará, aparece ella. Ella, como siempre, con su "¿Qué pasa, Ele?". Y te salva. Impide que te precipites en ese abismo insalvable.
Y te salva, una vez más.
Te salva.
No hay comentarios:
Publicar un comentario